Durante la noche es posible ver muchas cosas que prácticamente son invisibles en el día y uno de estos elementos que han acompañado a diferentes civilizaciones son las constelaciones, ya que debido a la naturaleza del universo se pueden apreciar en un momento exacto y con un poco de creatividad incluso es posible darles forma.
Desde el pasado se ha tenido curiosidad por lo inalcanzable y en este caso, las estrellas son uno de los objetos que predominan en el interés de las personas. Han servido como guía e incluso son parte de las historias únicas de una cultura. En este sentido, se pueden clasificar de distintas formas, ya sea por lo que representen o incluso por la posición en la que se encuentren en el cielo.
Constelaciones.
Se trata de un grupo de estrellas que aparecen en la esfera terrestre y que con el paso del tiempo les fueron asignados nombres de animales, seres de la mitología o incluso aspectos religiosos. Dicho esto, se pueden asociar a sellos, jarrones u otro tipo de objetos que se interpretaron así por astrónomos griegos, chinos o incluso egipcios del pasado.
Son comunes por ejemplo, las constelaciones que representan los signos del zodiaco y que aunque en la actualidad se utilizan en el lenguaje moderno, originalmente fueron nombradas con el latín. También se le puede denominar como asterismo, lo cual significa o se puede interpretar como figuras dibujadas por estrellas y de las cuales tenemos 88.
Circumpolares.
Con todo este contexto un punto importante que hay que entender es que debido a los movimientos de la tierra durante el año no es posible ver las mismas estrellas durante ciertos periodos de tiempo pero existe una excepción, ya que hay constelaciones que siempre se pueden ver desde la primavera hasta el invierno y esta son las que conocemos como circumpolares.
Éste grupo particular está conformado por la osa Mayor, la osa Menor, el dragón, la jirafa, casiopea, cefeo o lince. Para entenderlo mejor se puede ver desde la perspectiva de cada observador, ya que en el polo norte, debido a su posición se podrán ver las mismas estrellas, ya que parecerá que el cielo gira sobre sí mismo. Sin embargo, en el Ecuador será más difícil ver algo alrededor. Es entonces entre estos puntos, en una posición intermedia donde en el transcurso de una noche una constelación siempre será visible sin ocultarse en el horizonte.
Latitud y perspectiva.
Como todo esto depende del lugar donde se encuentre uno, hay latitudes donde se podrán ver las constelaciones siguiendo las características mencionadas anteriormente. Si por ejemplo, se está en el norte a una latitud 45° N, serán circumpolares todas aquellas constelaciones que se encuentren a una distancia inferior, es decir que se encuentren a menos de 45°, mientras que las que superen este número será por qué se ocultan en el horizonte.
Es por esta razón que se entiende que también es una cuestión de perspectiva, ya que de acuerdo a latitud es lo que se podrá ver en la noche, además de tomar en cuenta si uno se encuentra en el polo norte o sur. Un caso muy representativo de esto es la Cruz del Sur, la cual sólo se ve en el hemisferio sur, pero hay países donde sólo se alcanza a ver una parte, mientras que en otros lugares se puede ver completa. Con todas estas nociones, sólo se consideran circumpolares aquellas constelaciones cuyas estrellas principales siempre se vean en el cielo.