Cuando se trata de elegir los materiales para la ropa se tienen distintas opciones que toman en cuenta tanto la calidad como el valor estético de la prenda, y en este sentido existen elementos muy utilizados, tales como el poliéster, que presentan características únicas y justifican su uso sobre otras alternativas.
Los tejidos se han utilizado casi desde el principio de los tiempos, ya que la humanidad siempre ha tenido la necesidad de utilizar vestimenta, y por esta razón es normal que con la creatividad y la innovación se fabriquen telas de muchas variedades. En este caso se tiene algo artificial, que si bien puede no ser de la preferencia de muchas personas, ofrece ciertos beneficios en su uso.
Ventajas del poliéster.
Ideal para climas fríos.
Una de las características principales de estas piezas es su capacidad para retener el calor, por lo cual funcionan muy bien durante la temporada de invierno o en lugares con un clima muy frío en general. En este sentido, gracias a la versatilidad del material se pueden tener prendas cálidas sin necesidad de descartar la moda o el estilo.
Mantiene una buena apariencia.
Uno de los puntos que más los distinguen sobre otras alternativas es la forma en que conservan su color, ya que después de mucho tiempo la tela se sigue viendo como nueva. Otro detalle importante es que casi no se suelen arrugar, de modo que su apariencia tiene un buen impacto visual.
Suele ser más barato.
Debido a la disponibilidad de la materia prima, teniendo su origen en el pet, y debido al hecho de que se puede fabricar en masa suele tener precios más bajos que sus contrapartes de algodón, por lo que son bastante asequibles para la gente.
Resistente y elástico.
A pesar de ser más accesible se tiene una buena calidad que la hace bastante duradera, además de que también destaca por ser bastante elástica porque se puede estirar y recuperar su forma original sin problemas. Se notará que al lavarla no se encoge, por lo que no hay que preocuparse por su tamaño y normalmente son resistentes al uso.
Desventajas del poliéster.
Bloquea entradas de aire.
Desafortunadamente, el mismo factor que les permite ser prendas adecuadas para el frío, también es lo mismo que puede presentar inconvenientes en lugares más cálidos. Debido a que el aire no escapa y se retiene la temperatura corporal pueden llegar a ser incómodas por lo caliente, además de que con poca ventilación también predominaría el mal olor y el sudor.
Sensible a la temperatura.
De igual forma, debido a sus componentes y su naturaleza, se trata de un material con el que se deben tomar muchas precauciones cuando se limpia o se plancha. Para que duren más se recomienda plancharlos a un nivel más o menos tibio porque de lo contrario su vida útil se reduciría bastante o se llegaría a quemar.
Impacto ambiental.
Aunque este punto no tiene mucho que ver con el uso o la moda, se trata de una situación que la gente puede considerar para no utilizar estas alternativas. El poliéster es uno de los tantos derivados que existen del petróleo por lo que afecta indirectamente a la naturaleza con los procesos de extracción. Además, no es considerado biodegradable, de modo que se queda en el ambiente aproximadamente 400 años y por si fuera poco, si se combinan con otras sustancias es más complicado reciclarlo debido a que hay que separar cada componente.
