Una de las actividades más importantes para el desarrollo de los niños y jóvenes es el deporte, para que éste se realice de manera correcta es recomendable que se lleve un proceso gradual donde se vayan conociendo tanto las reglas de la disciplina como las capacidades físicas de cada quien.
En este sentido, existen los llamados juegos predeportivos, que si bien no son tan conocidos o populares como sus contrapartes más completas, tienen una función específica en su haber, porque funcionan como una preparación para lo que sigue, de modo que conviene entender de qué se tratan.
Juegos predeportivos.
Se pueden considerar como adaptaciones de los deportes tradicionales y recreativos que solemos practicar o ver en torneos a un nivel más intenso. Como su escala es menor, cumplen más bien una función inclusiva donde los jugadores desarrollan sus habilidades físicas y tienen oportunidad de interactuar con otros participantes.
Suelen omitir el aspecto competitivo que tienen las disciplinas de alto rendimiento, y en vez de eso se enfocan en la socialización, la recreación, y en general, el entretenimiento y la diversión. Por esta razón se recomiendan mucho a los más pequeños durante su desarrollo, ya que sirven como un estímulo mental y físico.
Función e importancia de los juegos predeportivos.
Prácticamente funcionan como una antesala donde es posible determinar si los niños están preparados para practicar el deporte en el que está basado. De esta manera, también incluyen reglas que generan un entorno de disciplina, donde se puede apreciar quiénes son capaces de seguir las normas, además de comprender el propósito de la actividad y los objetivos y los resultados que se buscan.
Tomando en cuenta todos estos elementos, es normal que se omita el factor competitivo, ya que al proporcionar un ambiente de más diversión, es más fácil estimular la enseñanza de las reglas y las capacidades físicas de cada persona. Por esta razón tienen un fin más pedagógico, ya que al compartir los mismos elementos a una escala menor, se aprenden las reglas y el funcionamiento del juego en general sin la urgencia de ganar.
Como en un deporte formal se integran todo tipo de participantes con diferentes características físicas, en estas versiones más amenas incluso se crean categorías de edad donde cada jugador va aprendiendo al mismo paso que los demás.
Otro punto importante de la versión predeportiva, es que funcionan como un puente que conecta el interés de una persona con el deporte más completo en el que está basado. Como son menos exigentes, una persona tiene la oportunidad de apreciar los aspectos positivos del juego sin agotarse tanto.
Darse la oportunidad de practicarlos.
Al final, se trata de actividades que pueden realizar tanto jóvenes como adultos, sin embargo son más recomendados para niños en una etapa de desarrollo donde estar expuestos a más conocimiento y experiencias les permite crecer integralmente. Después de todo y como se mencionó, sirven como una ventana a una actividad más demandante donde los errores o la competencia pueden generar más estrés.
Como uno de sus elementos clave es la diversión, no genera ningún tipo de compromiso para dedicarse de lleno a esto, por lo que se puede practicar muchos juegos hasta encontrar el que nos haga sentir cómodos. De esta forma, es posible tener mayor seguridad al momento de hacer la transición del juego al deporte, porque ya se habrán probado muchas experiencias a menor escala y la decisión de practicar un deporte estará basada más en la satisfacción y alegría propia que genera dicha actividad.