
En tiempos recientes la gente ha buscado diferentes formas de mantener su salud sin tener que llegar a los extremos con una dieta estricta, por lo que se busca algo flexible, pero que ofrezca beneficios al mismo tiempo al complementarse con otros platillos y en los búlgaros de agua muchas personas encontraron la solución.
También conocidos como tíbicos, han sido parte de la popularización de los probióticos que pueden incluirse en la alimentación de cualquier persona para mejorar la digestión o incluso formar parte de los regímenes dietéticos para prevenir enfermedades. Sin embargo, también es un hecho muchas personas aún no saben mucho de método y su uso presenta cierto escepticismo.
Búlgaros de agua.
Se trata de un conjunto de bacterias y levaduras que después de prepararse, van formando una bebida probiótica después de que una parte de azúcar que se le agregó se empieza a fermentar. La combinación del agua, los hongos tibicos y el azúcar forma una bebida lista para el consumo y que incluso se puede crear varias veces.
El detalle con este producto, es que la fermentación, a diferencia de otros organismos similares, en vez de producir leche hace agua, por lo que se tiene algo más fácil de preparar, pero con una gran cantidad de beneficios.
¿Para qué sirven?
El resultado es una bebida que contiene muchos minerales y vitaminas que ayudan al sistema inmunológico y en general, mejoran la salud. Esta es la razón por la que muchas personas la toman con tanta seguridad, ya que son una fuente de antioxidantes y además ayudan a mitigar diferentes padecimientos.
Prácticamente se trata de bacterias saludables cuyo efecto se ve cuando pasan por la flora intestinal, tal como en el caso de los yogures. Si bien se podrían comparar con estos productos, también hay que entender que no hay búlgaros iguales y que a diferencia del yogurt, pueden tener un uso más amplio.
- Diarrea.
- Colesterol.
- Mareos.
- Tos.
- Dolor de cabeza.
- Inflamaciones y dolor.
Uno de los puntos donde más tiene un efecto es en el cuidado de la flora intestinal, pero como se trata de un sistema que influye prácticamente en todo el cuerpo, las ventajas también se presentan en otros aspectos.
Utilidad confirmada.
Aunque su nombre puede variar en distintas regiones o su utilización puede encontrarse con ciertas dudas, es un hecho que se trata de un método comprobado para mantener la salud de una forma natural y sin muchas complicaciones. Pueden servir para tratar un problema que ya se tenga o simplemente para prevenir un mal mayor.
Después de todo, con la cantidad de nutrientes que aportan sólo habría que vigilar que el agua no nos caiga pesada para que así la tomemos frecuentemente. Es normal encontrarlo en tiendas naturistas, por lo que también se puede pedir consejo para su manejo y preparación, de modo que si un día se busca probarlos, será fácil encontrar gente con experiencia que nos pueda orientar.
Cuidado de los búlgaros de agua.
Como su preparación depende de la fermentación, hay que tener especial cuidado para que no les pase nada y puedan seguir produciendo la bebida que tomaremos. Debido a que son hongos, cada vez que se produzca el agua en vez de terminarse se multiplicarán, de modo que cada proceso que hagamos nos garantizará más producto.
Por esta razón, hay que mantenerlos refrigerados, agregarles piloncillo o hasta pedazos de jengibre para que puedan tomar el azúcar. Es recomendable almacenarlos en frascos de vidrio, los cuales garantizarán que no haya otro tipo de bacterias contaminando el cultivo y éste se tapará con paños para que así pueda haber un flujo de aire.
Un detalle que hay que recordar es que el agua que produzcan debe cambiarse al menos una vez al día, de modo que si no se va a consumir, al menos se debe guardar el agua preparada para otra ocasión, pero sin importar lo que se haga no hay que olvidar el cambio de líquido.
Para cuando se vuelva preparar, siempre es mejor utilizar agua potable porque está libre de contaminantes. Sin embargo, si no se tiene la posibilidad de utilizar liquido limpio, se puede hervir el agua durante diez minutos para eliminar otra clase de bacterias en su composición que podrían afectar a los tibicos.
Si bien puede parecer tedioso su cuidado, sabiendo exactamente para qué sirven y los beneficios que ofrecen, se puede considerar seriamente su uso y su inclusión en nuestra rutina para empezar a mejorar nuestra salud con un producto bastante agradable y particular.