Un fósil son los restos o rastros dejados por algún animal o planta que se preservaron a través del tiempo hasta nuestros días. La forma en que los encontramos puede variar pero la imagen más popular que se conoce de éstos son los huesos, tales como los que encontramos en zonas arqueológicas y después en museos, pero también se pueden encontrar como huellas o simples marcas.
Los detalles que traen consigo los fósiles son muy valiosos para entender como eran los tiempos antes de que existieran siquiera los humanos por lo que su estudio nos proporciona la información necesaria para conocer eras, entornos y seres completamente diferentes a los que tenemos en la actualidad.
Un fósil cuenta distintas historias.
Antes de comprender que eran exactamente los restos de huesos o huellas que se encontraban en las rocas las personas no les daban mucha importancia a lo que tenían enfrente pero cuando se dieron cuenta de que se asimilaban a animales e insectos comprendieron poco a poco de que se trataba todo.
Gracias a las marcas dejadas por todos estos seres en el pasado podemos entender un poco mejor el estilo de vida que tenían ya que por ejemplo, una mandíbula con dientes enormes nos habla de un animal carnívoro o en el caso de las plantas hay casos donde solo se puede inferir que clase de organismos eran porque simplemente ya no existen.
Con diferentes técnicas y con ayuda de la tecnología se puede estimar cuanto tiempo tiene la vida en la tierra y la relación que tienen los organismos del pasado con los del presente ya que durante todo ese periodo de tiempo hubo una evolución que llegó hasta nuestra era.
¿Cómo se forman los fósiles?
Cuando un organismo se muere, sus restos normalmente se descomponen y con el paso del tiempo se reducen a nada pero en ciertas condiciones se pueden fosilizar. Para que suceda esto los restos debieron ser sido enterrados rápidamente, protegiéndolos así de las condiciones del ambiente, limitando la descomposición y la actividad biológica, de tal forma que los huesos se mantenían protegidos mientras estaban enterrados con una temperatura y presión adecuadas para no destruirlos.
Este tipo de condiciones se dan normalmente en el agua por lo que algunos ejemplares vienen justamente de zonas que antes estaban cubiertas de agua, incluyendo huesos de dinosaurios y muestras de ámbar. Lo que se encuentra son restos de algún animal acuático o un animal terrestre que por una u otra razón termino en el fondo del mar.
- Una vez que muere, su cuerpo termina en el fondo.
- Si no hay depredadores el cuerpo se descompondrá.
- Poco a poco la tierra lo ira cubriendo hasta formar un sedimento.
- Ocurrirá la litificación: el sedimento se endurecerá, formándose una roca más dura.
- Ocurrirá la permineralización: los minerales alrededor del sedimento remplazaran a los minerales de los huesos, formando una versión mineralizada.
- Los restos permanecerán enterrados millones de años.
- Con el movimiento de las placas tectonicas lo que alguna vez estuvo enterrado quedara expuesto en la superficie nuevamente.
Después de todo este proceso los paleontólogos se dan a la tarea de desenterrar lo que más adelante conoceremos como un fósil.
Preservación de fósiles.
Tenemos dos formas de preservación, con alteración y sin alteración, que tal como indica su nombre, se refieren al estado en que se ha conservado el ejemplar. Ejemplos de casos sin alteración son la congelación y la momificación y para casos con alteración están los formados con permineralización.
Tipos de fósiles.
Aunque existe una gran variedad de ejemplares, la siguiente clasificación engloba la mayoría de las subcategorías.
- Cuerpo. Son los restos de un animal o planta, tal como los huesos, dientes, garras, caparazones, hojas, huevos, pieles y en general todo lo que contenga algún ser orgánico o parte de uno.
- Rastro. En este caso no son restos, sino más bien marcas dejadas por algún espécimen que revelan su comportamiento y pueden ser huellas, nidos, moldes, etc.
Un fósil trae consigo una gran cantidad de información que nos ayuda a entender como era el mundo antes de que fuera habitado por los humanos y nos muestra que cualquier forma de vida tiene un principio y un final. Gracias a éstos conocemos diferentes especies de animales que nunca más volveremos a ver por lo que podemos ser más conscientes con los seres a nuestro alrededor.