Cuando se busca comprar alguna propiedad siempre existen las opciones de pedir dinero a alguna institución financiera, la cual brinda la posibilidad de tener el dinero con ciertas condiciones que deben ser analizadas cuidadosamente, pero que con una decisión bien fundamentada las personas pueden salir ganando.
Una de estas opciones es la hipoteca multidivisa, la cual tienen rasgos diferentes a un préstamo común y corriente y que ofrece otro tipo de flexibilidad a la hora de saldar la deuda que se adquiere. Para saber si es lo que uno busca, hay que analizar los puntos que la hacen única y de ahí se podrán sacar conclusiones, tanto por sus beneficios como por sus riesgos, ya que movimientos de este tipo se realizan mejor después meditarlos con calma y con la información necesaria.
Hipoteca multidivisa.
Se trata de una hipoteca donde el dinero se presta en una divisa diferente al país donde uno se encuentra o como percibe su sueldo, ya que pueden ser dolares, libras, yenes, euros, etc. Como en cualquier otra herramienta similar, ya sería posible adquirir una propiedad, el detalle está en que su valor se mantendrá en la divisa extranjera elegida y en el periodo de tiempo que se haya estipulado al principio, los intereses también se cobraran en la moneda alternativa.
Ventajas.
La ventaja principal de este sistema es que los clientes se benefician de un interés más bajo que el manejado en su mercado. Esto significa que con el tiempo se ahorraría dinero, además de haber obtenido en forma una propiedad.
Desventajas.
La desventaja más clara en este caso tiene que ver con la inestabilidad de las tasas de cambio y las formas tan desproporcionadas en que pueden hacer que un simple préstamo se encarezca demasiado. Esto sucede cuando la moneda extranjera aumenta su valor frente a la que usa el cliente y como esto no es algo predecible, es un riesgo que se debe considerar cuidadosamente.
Ilustrándolo, si en el primer año la tasa de cambio era de 100 y se solicitaba una hipoteca de 300,000, el momento en que la moneda extranjera tomará fuerza, por ejemplo, la tasa el siguiente año fuera de 75, entonces la cantidad a devolver se elevaría hasta los 400,000.
Diferentes perspectivas.
Dicho esto, una de las divisas más populares en tiempos recientes para algunas zonas europeas como España ha sido el yen japones, ya que presenta cierta estabilidad y además, gana terreno frente al euro. La moneda elegida no esta limitada a ciertos países o gustos por el estilo, pero si la institución que presta el dinero desea ver alguna ganancia, entonces optará por divisas fuertes de las que se pueda sacar cierto interés, ya que de lo contrario, con el paso del tiempo perdería algo de dinero.
Del lado de la persona que solicita el préstamo este seria un escenario ideal, pero el detalle está en que no son ellos quienes ponen las condiciones para poder recibir dinero de alguien más. En este sentido, lo que le queda a uno, es pensar en una alternativa a la hipoteca multidivisa más amigable o hacer un análisis meticuloso de la situación del mercado actual e incluso de las previsiones que se tienen para el futuro, para que no se pague mucho más de lo que se pidió e incluso se tenga una ligera ganancia.