Es difícil para algunas personas destacar por sí mismas y comunicarse adecuadamente, ya que no quieren molestar a las personas a su alrededor, sean familiares o colegas de trabajo. Hablar con seguridad debería ser la norma, en especial para los adultos con responsabilidades o al frente de grupos sociales, pero no cualquiera puede hacerlo como quiere, por lo que conviene practicar ciertas dinámicas para mejorar nuestras habilidades al hablar.
La importancia de saber hablar por uno mismo.
La voz puede perderse en la mezcla de un entorno acelerado. Para quienes quieren ser escuchados y lograr sus objetivos, las habilidades de comunicación asertiva son fundamentales.
Transmitir nuestras opiniones puede ser más fácil cuando se hace de forma más activa. Las personas asertivas son directas y concisas en sus demandas o peticiones. Esto elimina la necesidad de hacer conjeturas e incertidumbres y garantiza que todo el mundo esté en la misma página.
El respeto también se fomenta con un discurso claro. Es más probable que la gente tome en serio y trate con respeto a alguien que se siente seguro al expresar sus pensamientos y emociones. Esto es especialmente importante en el lugar de trabajo, donde el respeto es imprescindible para avanzar.
Hablar energéticamente puede ayudar a aliviar la tensión y los desacuerdos. Las probabilidades de que se produzca una pelea o una disputa disminuyen cuando uno se expresa correctamente y con claridad. Es más probable que las discusiones sean útiles y beneficiosas si todos son abiertos y honestos en su dialogo.
Por esta razón es importante practicar la asertividad si se quiere mejorar la capacidad de comunicación. Mantener conexiones interpersonales positivas es una estrategia que utilizan las personas para reducir sus niveles de estrés.
Dinámicas para la comunicación asertiva.
Para empezar a cambiar, se pueden realizar ciertas actividades en la vida diaria que nos generen hábitos positivos cuando interactuamos con otras personas. Si bien no importa la edad para tratar de practicar esto, los adultos deben darle más importancia por la posición que puedan tener en su familia o su lugar de trabajo, ya sea para mantener la disciplina o liderar a otras personas.
Afirmación negativa. Aquí lo que se hace es analizar cada parte de nuestros argumentos, hacer una autocrítica y si encontramos que cometimos algún error o nos portamos de manera equivocada, entonces lo admitimos y nos disculpamos. De esta forma, evitamos ser manipulados, pero además desviamos cualquier clase de agresión que se este tratando de ejercer.
Repetir algo una y otra vez. Tal como lo dice su nombre, se trata de la actividad de repetir varias veces lo que hicimos o pensamos. El propósito de esto es no dejarnos influenciar por los argumentos de los demás y mantenernos firmes en lo que creemos.
Nebular. En este caso, se está más abierto a la crítica, pero uno se sigue manteniendo firme en sus convicciones e ideas. Esto quiere decir que, si bien escuchamos atentamente la opinión de alguien más, no damos explicaciones sobre nuestro argumento, no tratamos de justificarlo y simplemente creemos lo que decimos.
Ignorar. Como lo indica su nombre, se trata de ignorar ciertos comentarios hechos por los demás, de modo que se le ponga fin a una discusión que no se quiere continuar. Esto permite dejar claro el punto que uno tiene para mantenerse firme en que no tiene caso seguir discutiendo.
Ser alguien más seguro de si mismo.
Si quieres aprender a hacerte valer por ti mismo, es un talento que se puede aprender y cultivar. Para ayudarte a ser más contundente, aquí tienes algunos consejos:
- Utiliza un tono de voz firme y mantén el contacto visual.
- No te guardes lo que quieres o lo que no deseas.
- Evitar poner excusas o disculparse innecesariamente.
- Mantener una postura erguida y tener un comportamiento abierto y tranquilo.
- Trabajar primero en las cosas pequeñas y luego pasar a las más grandes.
Ser más enérgico es uno de los mejores consejos de comunicación que se pueden tomar. Es posible ser asertivo sin parecer prepotente u hostil y, al mismo tiempo, transmitir el mensaje con claridad y firmeza. También es importante no dejar abierta la posibilidad de una mala interpretación con las palabras.
Para evitar que nos persuadan de nuestros objetivos, debemos ser sinceros y explícitos sobre lo que deseamos. Ser amable y conciliador es una señal de que no tenemos nada más que dar a la otra persona.
Seguridad y temple.
En resumen, hay varias razones para que trabajes en convertirte en una persona más segura. La asertividad y la confianza pueden incluso mejorar la calidad de vida de una persona cuando se aplican de manera correcta. Establecer límites con los demás también puede conducir a mejores amistades. Además de que mostrarse seguro también es una forma de guiar y estar al frente de los grupos por lo que al final depende de cada quien tomar acción para cambiar.