El sueño es uno de los elementos fundamentales para las personas, ya que nos permite descansar y reponer energías para el siguiente día, pero el estrés, el ritmo ajetreado y en general, los diferentes estilos de vida complican esta situación, provocando que muchas personas no sean capaces de dormir bien.
Lo ideal sería conciliar el sueño por muchas horas durante la noche, pero la realidad es que la gente tiene poco tiempo para descansar. Hay quien no suele darle mucha importancia a esta situación porque los efectos no necesariamente se notan al corto plazo, pero sin duda existe un impacto en el cuerpo que no conviene ignorar. Para algunos será difícil cambiar su rutina aun sabiendo esto, pero intentándolo poco a poco será posible cambiar algo para bien.
Causas de no dormir bien.
Un estilo de vida pesado.
Ya sea por la escuela o por un empleo, hay deberes que implican pasar más tiempo despierto y aunque esto se hace de manera voluntaria, también tiene mucho que ver con las pocas horas que se duermen al día. En este sentido influye mucho el ambiente de trabajo o el nivel al que se está estudiando, ya que en una universidad hay veces que los alumnos se desvelan para estudiar o terminar alguna tarea, mientras que en los trabajos las horas extras afectan el tiempo que se duerme
El estrés.
Si bien esta situación engloba muchos factores el desgaste, que se tiene en la mente por esta situación dificulta más el dormir adecuadamente. En este caso no pueden ser sólo problemas laborales o académicos sino que también hay factores familiares o sociales como un conflicto con un amigo o algún desacuerdo con una pareja. Hay veces que se piensa tanto en esto que es normal pasar la noche despierto.
Trastornos del sueño.
Muchas personas se encuentran en esta situación incluso sin saberlo, porque algunas cosas nos parecen tan naturales que nos llegamos acostumbrar a esto. El insomnio es uno de los casos más representativos, pero también hay cosas tan comunes como el roncar o tener pesadillas constantes.
Consecuencias de no dormir bien.
Afecta la memoria.
Un buen descanso es esencial para reponer las energías y la mente, pero sí éste no es adecuado, lo normal es que haya un desgaste, y la memoria es uno de los elementos donde más se nota. Es suficiente una mala noche para darse cuenta de qué es más difícil retener la información y además, la concentración también se ve afectada.
Accidentes.
El tiempo que no se haya dormido durante la noche se tratará de reponer en el día aunque no queramos, por lo que esta situación podría derivar en accidentes. Ya sea que alguien se quede dormido al volante o por no concentrarse lo suficiente al cruzar la calle, las situaciones son muchas pero los resultados casi siempre terminan mal.
El cuerpo se vuelve más vulnerable.
Mientras dormimos en nuestro cuerpo ocurren diversos procesos que fortalecen el sistema inmune, por lo que al mantenernos despiertos durante la noche influimos en que nuestro cuerpo se vaya debilitando y sea más propenso a enfermedades. En este sentido se ha comprobado que quién descansa adecuadamente llega a tener más anticuerpos que las personas que se desvelan.
Se afecta el metabolismo.
Es también durante el sueño que el metabolismo trabaja en la síntesis de diferentes hormonas, las cuales influyen en la energía que tenemos y hasta en los procesos que se realizan en nuestra mente. Si el metabolismo trabaja con una menor eficiencia, es probable que nos despertemos más cansados.
Se envejece más rápido.
La piel es uno de los elementos más perjudicados por no dormir bien, ya que hay algunas hormonas producidas durante el sueño qué tienen funciones reconstructoras como la melatonina. Este problema se nota en la apariencia debido a las ojeras y la aparición de arrugas prematuras.
Menor rendimiento físico.
Con menos energía no es posible realizar actividades fisicas de forma eficiente. La gente acostumbrada a hacer ejercicio notará más fácilmente como su rendimiento baja, pero incluso quienes tiene un estilo de vida más sedentario se verán perjudicados porque la falta de ejercicio y sus malos hábitos solo se acentuarán.
Cambios de humor.
Sin un descanso adecuado lo más probable es que las personas despierten enojadas o que durante el transcurso del día su humor vaya cambiando de forma negativa. Los factores que influyen en estos son muy diversos pero puede ser por un dolor de cabeza, el ruido del trafico e incluso por la iluminación de las calles.
Diversas enfermedades.
Los malos hábitos alimenticios también provocan que cueste trabajo dormir correctamente, ya que la gente suele tomar bocados durante la noche de una forma constante. Esto puede derivar en enfermedades relacionadas con nuestro peso, además de que la nutrición de cada individuo se irá deteriorando al largo plazo.