
Las influencias de nuestro entorno nos moldean de muchas maneras. A medida que crecemos, aprendemos de nuestras familias y amigos, de los medios de comunicación y de nuestra cultura. Todos estos factores influyen en nuestras creencias, valores y comportamientos y, aunque estas ideas pueden parecer muy complejas, se explican por medio de la teoría sociocultural de Vigotsky.
Este tipo de ideas pasan desapercibidas porque se trata de procesos que se dan de manera natural en el entorno donde crecemos. Sin embargo, son de vital importancia porque ayudan a explicar el tipo de comportamientos que adquieren las personas y las influencias que hicieron que eso fuera posible. Después de todo, nuestras experiencias al crecer influyen en los adultos que llegamos a ser.
¿Qué es la teoría sociocultural de Vygotsky?
Postula que el aprendizaje humano está moldeado en gran medida por la cultura y la sociedad. En otras palabras, nuestro entorno desempeña un gran papel en nuestro desarrollo como individuos. Esta teoría ha sido influyente en los campos de la educación y la psicología, ya que proporciona un marco para comprender cómo aprenden mejor los seres humanos.
La cultura configura el desarrollo cognitivo. Nuestras interacciones con los demás desempeñan un papel importante en la forma en que aprendemos cosas nuevas y organizamos nuestros pensamientos a medida que crecemos.
Importancia de esta idea.
La importancia de este trabajo se debe en parte a que la teoría proporciona una perspectiva única sobre el papel de la cultura en el desarrollo y el aprendizaje humanos.
En este sentido, se destaca lo relevante que es el entorno en la formación de la cognición y el comportamiento humano. Según este punto de vista, los individuos interiorizan los valores, creencias y normas culturales a través de sus interacciones con los demás dentro de su entorno social. Como tal, la cultura desempeña un papel importante en la mediación de los procesos cognitivos y en la influencia del comportamiento individual.
Una de las implicaciones de esta perspectiva es que la educación debe tener en cuenta la influencia del contexto histórico y cultural en el proceso de aprendizaje de los alumnos. En otras palabras, las estrategias de enseñanza eficaces deben ser sensibles a los antecedentes y experiencias culturales de los jóvenes. Además, los maestros deben ser conscientes de cómo las distintas culturas pueden valorar ciertos tipos o aspectos del conocimiento por encima de otros.
Por ejemplo, algunos lugares dan más importancia a la memorización que a las habilidades de pensamiento crítico, mientras que otras pueden dar más importancia al aprendizaje cooperativo que a los logros individuales. Al tomar en consideración estas diferencias, los maestros pueden diseñar materiales y actividades de enseñanza que tengan más probabilidades de ser culturalmente sensibles y, por tanto, más eficaces para todos.
¿Cómo nos ayuda esta idea a comprender el desarrollo humano?
Nos ayuda a comprender el desarrollo al situar la educación en un contexto social. La teoría destaca la importancia de la cultura y la sociedad en la configuración del crecimiento de la gente. También destaca el papel del lenguaje como herramienta mediadora del pensamiento y la acción.
En este sentido, este trabajo ha sido influyente en los entornos educativos, ya que proporciona un marco para comprender cómo aprenden los niños a través de la interacción con otras personas con más conocimientos.
La cultura y la sociedad.
Algo que destacó fue la importancia de la cultura y la sociedad en la formación del pensamiento y el comportamiento de los niños. Se creía que los niños aprenden mejor a través de la interacción social con miembros más experimentados de su cultura, como los padres, los profesores y los hermanos mayores. A través de estas interacciones, los niños interiorizan los valores, creencias y normas de su comunidad.
Por ejemplo, los pequeños que se han criado en un hogar religioso tienen más probabilidades de seguir los mismos pasos que sus familiares. De igual forma, si las familias tienen ciertos valores arraigados a su cultura, es probable que las nuevas generaciones adapten dichas ideas conforme vayan creciendo.
Papel de los adultos.
Para Vygotsky, los adultos servían como modelos para los niños en el desarrollo de las capacidades cognitivas y sociales de los pequeños. El adulto proporciona un andamiaje para que el niño se base en él mientras desarrolla su propia comprensión del mundo que le rodea. Sin este apoyo, los niños se verían abandonados a su suerte y no podrían desarrollarse al mismo ritmo.
Vygotsky creía que los pequeños nacen con un cierto potencial mental, pero es a través de las interacciones con los demás como pueden alcanzar su pleno potencial. En este aspecto, las figuras paternas o una persona que cumpliera este papel desempeñaban una tarea importante a la hora de proporcionar oportunidades para que los niños interactúen con su entorno y aprendan de esas experiencias. Además, los adultos pueden proporcionar orientación y apoyo cuando sea necesario, ayudando a los jóvenes a desenvolverse en situaciones difíciles y a dar sentido a la nueva información.
Aunque los adultos no siempre sean conscientes de ello, sirven constantemente de modelos para las nuevas generaciones. La forma en que hablamos, nos vestimos, nos comportamos y nos relacionamos con los demás envía mensajes fuertes a quienes nos rodean.