El conocimiento es una de las cosas más importantes en nuestra vida. Nos permite tener una comprensión más profunda del mundo que nos rodea y tomar mejores decisiones. Sin embargo, a veces, éste puede ser abrumador o difícil de alcanzar, pero siempre es posible aprender y cambiar nuestro punto de vista y más cuando las cosas se aplican a diferentes áreas y se encuentran nuevas utilidades a las cosas que ya conocíamos.
Se dice que la única constante es el cambio. En un mundo que cambia rápidamente, a menudo es necesario adaptar las viejas técnicas a los nuevos ámbitos. Hacerlo nos permite estar al día y mantener nuestros conocimientos aplicables a cosas útiles. Esto ocurre con cualquier nueva tecnología o cambio que se produzca, por lo que es importante entender de que trata este concepto y, ser capaz de adaptarse y cambiar con los tiempos para tener éxito.
Resignificación del conocimiento.
Es el proceso mediante el cual podemos reinterpretar el significado de un campo de conocimiento para hacerlo más adaptable a otros ámbitos donde pueda utilizarse y, de esta manera, adecuarlo a nuestras necesidades. Esto nos permite ser más flexibles y creativos en el uso de nuestras habilidades. También nos ayuda a darnos cuenta de que el saber es algo dinámico y está constantemente cambiando.
Resignificar el conocimiento nos ayuda a mantener una mente abierta y aceptar que no sabemos todo. Esto nos da la oportunidad de aprender nuevas cosas y ampliar nuestra perspectiva. También nos permite darnos cuenta de que el conocimiento es un recurso valioso y que debemos usarlo de manera responsable.
Los significados de la resignificación.
Cuando un individuo resignifica los conocimientos de su campo, esencialmente está tomando la comprensión preexistente y adaptándola para que encaje en un nuevo contexto. Esto puede hacerse por varias razones, como llenar un vacío en la comprensión de un área específica o hacer que el conocimiento sea más relacionable con otros.
En algunos casos, puede ser necesario tomar el conocimiento de un campo y darle un nuevo significado para adaptarlo a un área específica. Esto puede ocurrir cuando la información está evolucionando y se necesitan nuevas ideas para seguir el ritmo de las transformaciones. También puede ocurrir cuando alguien con experiencia se adentra en otras disciplinas y aporta sus conocimientos.
La química y la tecnología en general tienen muchos ejemplos que se adaptan a las necesidades de las personas en forma de productos:
- El Flúor o el Zinc como elementos químicos se pueden encontrar en pastas de dientes que involucran la higiene personal y hasta la salud.
- La aleaciones de hierro como el acero se ven en carros, sillas, herramientas y muchas cosas más.
- Incluso en cosas más actuales, el gps que solo se pensaba para la navegación, ahora se utiliza para el rastreo, la seguridad y hasta planeación.
- El mismo Internet que solo era un espacio cerrado donde compartir cosas ahora es toda una base de información y comunicación entre la gente.
Vemos así, que a través de este proceso, tomamos lo que ya sabemos y lo aplicamos de manera diferente para adaptarlo a nuestras necesidades y circunstancias actuales. Esto nos puede ayudar a entender mejor un concepto o problema, y también nos puede ayudar a encontrar nuevas soluciones.
En este sentido, un factor muy importante es el contexto cultural en el que se encuentren las personas. Esto porque son las circunstancias de cada individuo lo que motiva y crea las necesidades. Las sociedades en hábitats fríos por ejemplo, utilizaban pieles, construcciones más gruesas o aislantes, pero en climas templados o cálidos no habría necesidad de esto. Por esta razón, la innovación tecnológica también depende de lo que se tenga y lo que se quiera lograr.
Para aprender a resignificar, debemos estar dispuestos a cuestionar nuestro conocimiento y nuestras ideas. Debemos buscar nuevas formas de ver las cosas, y debemos estar abiertos a experimentar e investigar, ya que de esta forma se puede innovar.
Adaptarse a las distintas situaciones con la experiencia.
El mundo está cambiando rápidamente y nosotros tenemos que cambiar también. A veces esto significa aprender nuevas habilidades, otras veces requiere de una perspectiva diferente. A final de cuentas, la capacidad de adaptarse es una de las principales claves del éxito en la vida.
Aun así, la perspectiva es algo muy personal, pero podemos aprender a ver las cosas desde un punto de vista diferente si estamos dispuestos a hacerlo. A veces, el simple hecho de cambiar nuestra forma de pensar puede ayudar a crear algo que le sirva a ciertas personas. A medida que la tecnología siga evolucionando, es probable que se encuentren aún más usos para las cosas que ya tenemos, que en la actualidad ni siquiera podemos imaginar.