
En la actualidad sabemos que existen una gran cantidad de ondas en el espacio que se propagan en todo momento de un punto a otro, utilizando un medio por el cual desplazarse. En situaciones de la vida diaria tenemos el sonido, el cual viaja desde una persona a otra a través del aire.
De una forma más compleja se puede describir a una onda como una perturbación que trae energía consigo, la cual se mueve utilizando un gran número de partículas como medio: agua, aire, etc. Como tal, tienen diferentes magnitudes para describir varias de sus propiedades, que nos ayudan a entender mejor su comportamiento y una de ellas, es la frecuencia.
Frecuencia de onda.
Esto se refiere al número de ondas que pasan cierto punto en una cantidad determinada de tiempo. En este caso se puede medir contando cuantas crestas se generan al pasar el punto y entre más crestas haya, éstas estarán más pegadas y la frecuencia será más grande. Por el contrario, cuando las crestas estén más separadas, la medida de esta magnitud será mucho menor. La unidad que les corresponde son los hertz (Hz), lo que es igual a 1 onda por segundo.
En este tema, las vibraciones también están muy relacionadas ya que es gracias a éstas que se crean las ondas. Cuando la energía aplicada es mayor o en otras palabras, hay mas vibración, los hertz también aumentarán.
Diversos ambientes.
Al menos alguna vez se habrá escuchado decir que la radio o la televisión se realizan a ciertos hertz y esto se debe a que detrás de sus transmisiones están todos estos principios. El detalle aquí es que como los medios de comunicación utilizan una gran cantidad de energía para llegar a muchas personas, las unidades que suelen estar multiplicadas 1000 veces o incluso más, ya que se usan kilohertz o hasta megahertz.
Para tener una referencia de la gran diferencia que hay entre ambos ambientes, se puede mencionar que al hablar es suficiente con la unidad simplificada para medir la frecuencia de onda.
También cabe mencionar que al analizar casos más complejos es inevitable no mencionar el espectro electromagnético, donde se engloban todas las frecuencias posibles, aunque es este aspecto, la referencia principal son las longitudes.
En este sentido, los humanos se encuentran en una parte muy baja del espectro, ya que los sonidos producidos y escuchados no tienen mucha energía. En el caso de los puntos más altos que se conocen se pueden mencionar los rayos ultravioleta o los rayos gamma, donde se tratan los átomos e incluso cosas más pequeñas como sus núcleos.
Una de muchas propiedades.
Al final, lo que hay que recordar es la unidad utilizada para medir su magnitud y para distinguirla bien, hay que procurar no confundirla con la distancia recorrida o la velocidad a la que lo hace, ya que esas propiedades, propias de una onda, reciben otro nombre.