
Cuando uno piensa en realizar ejercicios que ayuden tanto al cuerpo como a la mente, hay dos términos que se nos vienen a la mente: yoga y pilates. A pesar de que parecen actividades idénticas, tienen detalles que separan a una de la otra y para comprender estos puntos no es necesario practicar estas disciplinas, ya que involucran tanto sus orígenes como su propósito en general.
Yoga, origen y características.
El yoga, más que una serie de ejercicios para donde hay que estirarse es un método que ayuda a la mente por medio del movimiento físico. Éste se origino en la India hace aproximadamente unos 5000 años y desde ese entonces ha incluido en la practica la meditación, una respiración adecuada e incluso una filosofía y un estilo de vida propios.
Durante las sesiones de yoga se realizan poses conocidas como asanas y ejercicios de respiración llamados pranayama. Estas poses tienen variaciones de acuerdo al estilo de cada quien y pueden ir desde posiciones simples y fáciles hasta posturas más demandantes y estimulantes para los músculos. El tono muscular se acentúa y las articulaciones se relajan y uno de las características de esta disciplina es que no se necesita equipo mecánico ya que el cuerpo es la única herramienta.
Estos ejercicios ofrecen un equilibrio entre nuestro bienestar físico y emocional, mejorando la flexibilidad y coordinación del cuerpo y reduciendo la tensión y el estrés con la meditación. El rasgo único del yoga es ese enfoque filosófico que acompaña los ejercicios y que lo distingue de otras practicas similares.
Pilates, origen y características.
Los pilates son un ejercicio joven ya que se crearon en la década de 1920 aproximadamente por un enfermero alemán llamado Joseph Pilates. Debido al contexto de la época, esta practica estaba enfocada en la rehabilitación de soldados heridos pero con el paso del tiempo, bailarines adoptaron estas técnicas y además de su propósito original también lo practicaban para mantenerse en forma. Finalmente en la época de los 90’s los pilates tomaron fuerza, ya que se mostraban como una forma de mantenerse fuerte, tener la elasticidad de bailarines y estar libre de lesiones.
Una de las razones por la que se pueden confundir ambos términos es porque los pilates tienen cierta influencia del yoga de la antigüedad, pero a diferencia de la versión moderna, en este caso se hace énfasis en los músculos centrales, tales como los abdominales o la espalda porque se consideran como la base del movimiento de todo el cuerpo. Se puede usar solamente el cuerpo pero también hay maquinas para aumentar la resistencia que involucran el uso de cables y poleas.
Los beneficios de estos ejercicios se notan en los músculos abdominales, como se trabaja la espalda la columna se estabiliza dando una mejor postura y equilibrio. A diferencia del yoga, aquí se trabaja más la parte física de una forma más simple y directa.
¿Cuál elegir?
La pregunta se responde desde diferentes perspectivas y necesidades pero cada disciplina tiene sus beneficios y la combinación de las dos puede traer resultados que nos agraden. Los pilates fortalecerán nuestro cuerpo, mientras que el yoga cambiará tanto el estilo de vida como la salud.