
Hay muchos tipos diferentes de historias para elegir, como los relatos cortos, los cuentos o hasta las novelas y también tienen muchos estilos diferentes para narrar los acontecimientos, teniendo cada uno su propio atractivo. En este aspecto, una narrativa que destaca por su sencillez, pero también por su efectividad es la de la trama lineal.
Cada tipo de libro dará una experiencia diferente, pero en muchos casos lo que marca la diferencia es la forma en como se presenten los actos. En este sentido, las técnicas utilizadas son variadas y, aunque se elija seguir un guion predecible o uno lleno de sorpresas, al final se trata de una situación que juzgará el publico por si mismo.
¿Qué es una trama lineal?
Es un estilo en la que el orden sigue una misma secuencia. Los personajes transcurren de acuerdo a un plan preestablecido, evitando así toda intriga o cambio brusco en el curso del relato. Esta clase de contenidos tiene unas ventajas muy importantes: proporciona una cadena de acción coherente, permite analizar situaciones con objetivos cerrados y reducir el riesgo de incoherencias.
En este aspecto, determina los puntos de cruzamiento de las historias y evita que se pierda todo el sentido por culpa de eventos que ocurren fuera de la trama tradicional. En resumen, si bien todo puede desmoronarse en determinado momento, al menos hay una línea que nos guía hacia el final.
Este tipo de estructura de la historia tiene un principio, un medio y un final. Es fácil de seguir y suele atraer a los lectores porque es predecible. Permiten a los autores explorar diferentes ángulos y líneas argumentales sin tener que meterlas todas en una disposición finita. Puede ser difícil de llevar a cabo, pero si se hace correctamente, puede ser increíblemente gratificante porque tanto los hechos como su conclusión quedan claros al final. Sin embargo, también tiene su lado negativo, ya que para muchos lectores, las historias no lineales son más interesantes.
¿Es del agrado de todos los lectores?
La trama lineal es considerada una narrativa que cautiva a los lectores desde el principio hasta el final. Está basada en la ilusión de que todo termina bien, o al menos, no deja incertidumbre y cubre un sendero homogéneo. Sin embargo, esta forma de contar la historia tiene sus lados negativos, ya que hace que el lector pueda no ver ninguna salida posible. Además, surge como un proceso simple e ineficaz cuando se intenta explorarlo por completo.
Mucha gente piensa que una historia lineal es el único tipo de historia que funciona bien. Aunque es una forma eficaz de contar una historia, no es la única opción disponible. Después de todo, mezclar el formato puede dar vida a las historias y hacerlas más interesantes. En algunos casos, lo lineal puede ser restrictivo, y también puede ser aburridas si se hace con demasiada frecuencia.
Ventajas de la trama lineal.
- La organización de una historia tiene claridad para el lector.
- No hay modificaciones continuas, por lo que el ritmo es constante.
- El progreso es evidente, favoreciendo el aprecio por la lectura.
- La narrativa puede focalizarse en un tema concreto, reduciendo las distancias entre los personajes y los acontecimientos.
- La trama constituye una estructura clara en lo que se refiere a sus diversos miembros y permite una mayor simplificación de la información.
- Hay un grado elevado de concentración durante el lectura, estimulando así el aprendizaje.
Viendo todo esto, puede definirse la linealidad en una historia como las circunstancias o eventos siguiendo un patrón previsto, sin preocuparse por el orden en que se producen. Esto puede deberse al resultado de la preparación, pensada e implantada por el autor. Sin embargo, aunque funcione estrictamente bajo ese criterio, no está exenta de las irregularidades comunes. Por ejemplo, podemos observar que la relación entre las personas parece estar mal planeada hasta el punto de no lograr guiar a la trama. Otras veces se nos presentan personajes atrapados en situaciones adversas que no tienen mucho sentido relativamente a sus acciones anteriores.
Aun así, este formato destaca porque todo sigue siendo lo mismo hasta el final. La gente recupera su vida normal, los personajes se intersectan y todo es funcional. Sin embargo, este tipo de historias suelen ser poco relacionadas y no tan emocionantes.
¿Cómo reconocer una trama lineal?
Los personajes y las escenas pueden dar saltos de vez en cuando, pero el argumento general seguirá siendo lineal. Es útil buscar la cohesión entre las diferentes partes de la historia. Esto significa que todos los elementos deben funcionar juntos para apoyar los acontecimientos. Esto incluye los personajes, la escena, el escenario y los temas. Si alguno de estos elementos falta o está mal ejecutado, puede indicar que se trata de algo que se desarrollará mucho después o incluso en otra parte.
Una vez terminada la historia, empieza por buscar un principio y una conclusión clara. El principio debe presentar a los personajes principales y establecer el escenario de la historia. La conclusión debe resumir los acontecimientos que han tenido lugar y resolver la trama.
La historia esperada.
Este estilo es una forma en la que el autor construye su historia por medio de una estructura simple pero interesante y, como resultado, el lector puede esperar ver ciertas características repetidas hasta el final. Sin embargo, esto no significa que la propuesta sea defectuosa; se puede preferir este formato sobre otras cosas. Después de todo, esta estructura ha mostrado ser un género efectivo para novelistas de todos los rincones del mundo.
Al final, hay muchas opiniones en cuanto al formato presentado, ya que algunos creen que son la mejor opción para contar historias, mientras que otros creen que los enfoques con más sorpresas, diferentes perspectivas o simplemente, menos tradicionales son mejores. Esto solo es muestra de que cada quien tiene sus gustos, por lo que depende de cada persona juzgar las historias que lean.