En el mundo de las matemáticas, siempre se manejarán los números de manera lógica, analítica o de muchas formas más. Es algo que puede aprenderse en cualquier etapa de la educación, pero es especialmente importante siendo jóvenes para desarrollar correctamente las habilidades para comprender mejor dichos temas. En este aspecto, hay dos conceptos muy importantes que muestran la capacidad de cada individuo para dominar este tema: el sentido numérico y el pensamiento algebraico.
Las matemáticas están en todas partes, ya que son una buena forma de entender el mundo. Son capaces de ayudarnos a controlar nuestras situaciones, a actuar racionalmente y entender una gran cantidad de procesos en el mundo. Sin embargo, muchos de nosotros no nos damos cuenta de lo poderosa que es nuestra inteligencia matemática hasta que no la utilizamos, simplemente porque no se sabe como desarrollarla.
¿Qué es el sentido numérico?
Es la capacidad de comprender y utilizar los números en la vida cotidiana. Incluye ser capaz de contar, sumar, restar y hacer todo tipo de operaciones de forma significativa. En este sentido, se podría considerar como la capacidad humana de conceptualizar y utilizar el orden en relación a los números. Es una herramienta invaluable para explorar el mundo físico y matemático, ya que es la base para realizar después actividades como estimaciones, razonamiento lógicos, construir estructuras algebraicas o hacer cálculos.
En este caso, son acciones que parecen muy simples, pero que justo por eso son importantes. Contar es algo que hacemos a diario, pero también nos muestra que es fundamental obtener el conocimiento desde los elementos más básicos y a partir de ahí, avanzar hasta donde sea posible.
¿Qué es el pensamiento algebraico?
Es el nombre dado a la forma de pensar que se utiliza en diversos aspectos de las matemáticas. Se puede definir como una forma de analizar situaciones que requieren actuaciones rápidas y precisas. Los problemas algebraicos normalmente requieren soluciones técnicas y no están limitados por las formas, por lo que este razonamiento contribuye a la imaginación, creatividad, innovación o la solución de problemas.
En este aspecto, se podría considerar como la capacidad de pensar de forma abstracta. Implica tomar situaciones complejas y descomponerlas en partes más pequeñas para poder entenderlas. Esto puede hacerse mediante fórmulas, símbolos y ecuaciones. Los pensadores algebraicos son capaces de resolver problemas con rapidez y facilidad debido a que ven la situación desde diferentes perspectivas. Utilizan el álgebra para entender cómo funcionan las cosas y para resolver problemas que no han visto antes.
¿Cómo se desarrollan estas inteligencias?
Una forma de desarrollar este tipo de razonamientos es practicar la resolución de problemas, operaciones, hacer análisis lógicos y en general, todo lo relacionado con los números y su aplicación.
El sentido numérico y el pensamiento algebraico son dos habilidades importantes que pueden ayudar a los estudiantes a tener éxito en las matemáticas y en otras materias académicas. Permiten a los alumnos comprender y trabajar con los números de diversas maneras, lo que puede conducir a un mejor rendimiento en áreas analíticas, numéricas y lógicas.
- Resolución de problemas. Cuando los alumnos comprenden bien cómo funcionan los números, son capaces de resolver problemas con mayor facilidad. Esto se debe a que son capaces de ver patrones y conexiones entre las cosas.
- Comprensión. Estos conceptos ayudan a los jóvenes a entender conceptos abstractos como las ecuaciones algebraicas enseñándoles a enfocar la resolución de problemas desde una perspectiva basada en los números.
- Capacidad analítica. Gracias a estos dos conceptos es posible darse cuenta que las soluciones no están limitadas a un proceso y que se pueden idear varios caminos para llegar al mismo resultado. Esto permite que la gente tenga una mejor capacidad analítica y no se limite al momento de resolver cualquier situación.
¿Cómo ayudar a los alumnos con estos temas?
Hay varias formas de ayudar a los alumnos con estos conceptos. Una de ellas es proporcionarles rompecabezas y juegos que requieran que los estudiantes utilicen sus números, su razonamiento y sus habilidades para resolver problemas. Otra forma es hacer que los estudiantes practiquen problemas de los libros de texto de matemáticas. Por último, es importante contar con un buen plan de estudios que haga hincapié en estas habilidades.
Muchos estudiantes tienen dificultades con estos temas, por lo que se debe tener un plan donde promueva el interés y se muestre que no es algo complicado ni espantoso. Los profesores pueden utilizar juegos matemáticos en clase para ayudar a los jóvenes a practicar sus habilidades. También se puede incrementar el nivel con la introducción de algoritmos básicos en las clases, la división de los problemas en pasos manejables y la modelización de los conceptos difíciles mediante ejemplos concretos.
Al final, no hay una respuesta única a esta pregunta, ya que la mejor manera de ayudar a los alumnos a mejorar varía en función de la edad del estudiante, su nivel de comprensión y la ayuda adicional que los profesores puedan estar proporcionando. En última instancia, será necesario un esfuerzo de equipo de maestros, padres y estudiantes para apoyar eficazmente el desarrollo de las habilidades numéricas en la escuela.