En cualquier empresa o negocio siempre hay roles que resultan indispensables para el funcionamiento correcto del lugar, que van desde posiciones pequeñas hasta cargos con muchas responsabilidades, y el caso del gerente nos muestra cómo entender adecuadamente sus tareas puede garantizar un buen éxito.
En un trabajo se suelen seguir estructuras bien definidas que permiten realizar diferentes procesos con orden y eficiencia, con tal de que se crezca laboralmente. En este caso en particular, tenemos un líder con iniciativa, que podría ser considerado la cabeza que procura que todo se realice correctamente y se involucra en diversos sectores.
El gerente.
Se trata de la persona encargada de la planificación en una organización y el control que ésta requiere para crecer en el mercado. Prácticamente se tiene un representante de la empresa con una gran cantidad de funciones, pero también con entendimiento del negocio en cuestión y las necesidades que le presentan clientes actuales y futuros.
Si bien tienen actividades que pueden variar con los sectores, los puntos básicos de control y orden se mantienen igual. En una industria se pueden tener varios departamentos trabajando entre sí, y cada uno con su propio líder y sus propios objetivos, pero todos en conjunto buscando la mejora del trabajo y el desarrollo correcto de un negocio.
Funciones.
Es el profesional encargado de la planificación y control, o la definición de estrategias. En este sentido, puede tener tareas tan diversas como la contratación de personas, la capacitación de nuevo talento, o el establecimiento de metas, de modo que gran parte del funcionamiento es su responsabilidad.
Al estar encargados de grupos de personas, las metas son esenciales para definir el flujo de trabajo y la dirección que éste debe llevar. De esta forma, la organización que lleven definirá si se hace un buen trabajo, ya sean delegando tareas a los miembros que considere indicados, o buscando actividades posibles de realizar y que le acerquen al objetivo deseado. En este sentido, son profesionales que trabajan con el activo humano de la compañía, ya que sin los trabajadores no hay empresa que se mueva, y en este aspecto el gerente es el encargado de organizar y desarrollar dicho talento humano.
Como se mencionó, debido a la gran cantidad de departamentos que puede tener una industria, es el mismo número de gerentes que se pueden tener en sus respectivas áreas. Aunque los campos son diferentes, poseen una base en común pero también se tiene que conocer que hacen diferente.
Recursos humanos.
Este departamento está encargado de la gestión del personal y velan por el desarrollo y bienestar de los empleados. Como prácticamente trabaja con todos, se mueve por todas las estructuras de una empresa, manejando la gestión de las personas. Por esta razón, también se involucran en las entrevistas de trabajo y la capacitación de nuevos candidatos.
Administrativo.
En este caso sus tareas son la organización de las actividades y la sistematización de la información. Asimismo se encarga de la preparación de los informes y la planificación para alcanzar objetivos.
Finanzas.
En esta área trabaja con el lado financiero de una empresa y todo lo que tenga que ver con el manejo del capital. Esto quiere decir que está al pendiente del flujo de la caja, de las inversiones e incluso las cuentas que se tienen que pagar y cobrar.
Marketing.
Se pueden fabricar los mejores productos o tener el mejor servicio al cliente, pero sin la atención necesaria no se venderá nada. Es en este aspecto donde entra el trabajo del gerente, ya que se encarga de investigar el mercado y crear campañas y estrategias de ventas para que haya un interés por parte del público.
Comercial.
El enfoque está más inclinado al departamento de ventas, por lo que también involucra el servicio al cliente, con estrategias para mejorar el alcance en el mercado y hasta la imagen de una marca. Como los equipos a su mando están integradas por las personas que interactuarán con los clientes, una de sus tareas es capacitarlos para que ofrezcan un trato cordial y apegado a los valores de su lugar de trabajo.
Producción.
En esta área se encarga de vigilar que se mantengan los estándares de calidad con los elementos producidos. Esto involucra la cantidad de cosas fabricadas, y hasta la clase de materias primas que se utilizarán, teniendo en cuenta factores como costos y hasta plazos de entrega. De esta manera, su gestión se encarga de cuidar que se cumplan las metas de acuerdo a la demanda del mercado o de las necesidades de los clientes.
Como se puede ver, el alcance de sus funciones se puede expandir por cualquier área o departamento, y aunque el nivel de especialización en cada una puede variar, existen características que siguen teniendo puntos en común. Desde el cumplimiento de los objetivos hasta la garantía de la eficiencia con una buena organización, siempre se tendrá un profesional llevando por buen camino cualquier trabajo.