En la actualidad existen muchas cosas que le preocupan a la gente y en términos económicos uno de los problemas que genera más inquietud es una devaluación, por todos los problemas que generan y la duración de las secuelas en el bolsillo de las personas, que ve como su moneda va perdiendo valor ante otras economías.
Este tipo de crisis se presentan al menos una vez en la vida de la gente y aunque no suelen ser tan recurrentes en todo el mundo, cierta parte de la población ha sufrido los efectos de este fenómeno. Se pueden identificar ciertos patrones, como la fuerza de la economía del país e incluso la calidad de vida de las personas pero al final, es algo que afecta a todos sin distinción.
Causas de una devaluación.
Se busca competitividad.
Durante esta clase de escenarios la mercancía de los negocios que se vende al extranjero es más barata, por lo que también es más competitiva y de una forma u otra impulsa la economía nacional. En el mercado global, donde cada país tiene sus propios representantes en alguna industria es importante destacar sobre los demás y la devaluación permite esto al ofrecer algo más barato.
Generación de empleo.
Relacionado con el punto anterior, al contar con productos más asequibles que los de la competencia también se propicia que se construyan mas fábricas para cumplir con la demanda del mercado y por lo tanto se crean más empleos, aunque está no sea necesariamente la mejor forma de darle trabajo a la gente.
Reducir déficit comercial.
Cuando las importaciones son mucho mayores que las exportaciones se tiene un deficit muy grande, el cual puede ser reducido en este caso, y la balanza incluso se puede invertir. Una vez que se hace esto es posible evitar escenarios problemáticos que tienen que ver con la generación de deuda.
Consecuencias de una devaluación.
Exportaciones más baratas.
En este caso, lo que sucede es que los productos nacionales son más competitivos por lo que los negocios y las industrias locales pueden crecer e incluso tener más ganancias. Además, esto genera un poco de confianza en el mercado extranjero, porque algunas propiedades nacionales reducen su valor y se vuelve más fácil adquirirlas.
Importaciones más caras.
Por otro lado, en esta situación las importaciones aumentan su precio porque la moneda nacional pierde valor y es más costoso traer cosas del extranjero. Esto puede generar un incremento general de los precios, ya que los productos importados pueden incluir desde petróleo, el cual se necesita para el combustible, hasta los alimentos más básicos.
Inflación.
Otro de los efectos que tiene este fenómeno es el de la inflación, ya que en un periodo de tiempo los costos de las cosas van aumentando constantemente. Esto se puede deber el aumento del precio de las importaciones e incluso a la falta de incentivos que tendrían los productores para disminuir costos, ya que en estas circunstancias aprovechan la competitividad que les da la devaluación, aunque a largo plazo esto resulta contraproducente.
Menor poder adquisitivo.
La economía de la población es de las que más sufre el impacto de este evento, porque tienen menos posibilidades de adquirir algo y además, como su moneda pierde valor, sus salarios también valen menos, por lo que con estas circunstancias combinadas es más complicado adquirir alimentos u otra clase de productos.