A simple vista los términos de ética y moral pueden parecer iguales pero hay ciertas diferencias entre ellos que se pueden percibir en las personas, su perspectiva de la vida e incluso su actitud con los demás. Ciertas acciones les pueden parecer correctas a algunos, mientras que para otros son cosas que nunca se deben hacer por lo que también se ven involucrados los valores de cada quien.
Ética y sus características.
La ética son los principios o los códigos de conducta que aplican a una sociedad o un grupo de personas. En este caso tenemos un pensamiento más simple y fácil de entender ya que implica el seguir una serie de reglas socialmente aceptadas y que por lo general son iguales en cualquier parte del mundo.
En los ambientes laborales se suelen tener una serie de principios que transmiten confianza y seguridad a las personas que hacen tratos con ellos, desde doctores respetando la situación de sus pacientes, policías y funcionarios siendo honestos, hasta abogados trabajando sin involucrar sus asuntos personales.
Por esto mismo, surge en los grupos sociales a los que se pertenece como un ejemplo de la conducta adecuada que se debe tener y suele ser consistente sin importar el lugar en que se esté porque los trabajos alrededor del mundo tienen códigos similares.
Moral y sus características.
La moral trata los valores y las creencias de cada individuo sobre lo que es correcto y lo que no. En este caso es más complejo entender la moral desde una sola perspectiva ya que se involucran tanto factores como los valores con los que fue educado cada quien, como las cuestiones culturales de cada individuo.
En ciertos países una decisión controversial puede resultar de lo más natural en el otro lado del mundo porque la educación o las costumbres que se recibieron en la juventud fueron diferentes. Hacer trampa o ser mentiroso tal vez es natural para algunos pero para otras personas puede ser una actitud reprobable y lamentable.
Es por esto que se va formando con el paso del tiempo de acuerdo a lo que uno cree pero también está sujeta a cambios ya que el contacto con otras culturas puede cambiar la forma de pensar, por lo que es más flexible pero a su vez más compleja.
La razón de la confusión entre estas dos palabras se da porque la gente las intercambia al usarlas sin comprender muy bien lo que las distingue. Al final, tienen una relación muy estrecha ya que las acciones que tomamos dependen tanto de la ética como de nuestra moral. La ultima palabra la tiene cada persona, sobre hacer lo que nos pide la sociedad o hacer las cosas en las que creemos.