Las distintas culturas tienen diferentes formas de expresarse a través del arte. Se utilizaban las historias para comunicar mensajes y también servía como una forma de expresar emociones. Hoy en día, muchas versiones del arte antiguo se conservan en la actualidad, y uno de los ejemplos más representativos es el de las mandalas, que se sigue utilizando con estos fines y otros más.
El arte es un lenguaje universal que puede utilizarse para comunicarse entre culturas. Es una herramienta poderosa que puede expresar pensamientos y sentimientos que las palabras por sí solas no pueden describir y en este aspecto, también puede utilizarse para documentar la historia y preservar la cultura. Sin embargo, en este tema en particular se tiene un significado más profundo que las personas han utilizado de diferentes formas.
¿Qué son las mandalas?
Son círculos sagrados que han sido utilizados durante siglos por muchas culturas diferentes con diversos fines. Algunos creen que representan el universo y todo lo que hay en él, mientras que otros los ven como una forma de conectar con lo divino o con su yo superior. En este aspecto, también pueden utilizarse como herramienta de meditación y autorreflexión, ayudando a centrarse en el momento presente y a ser más conscientes de sus pensamientos y sentimientos.
No existe una interpretación correcta de este concepto, ya que pueden significar cosas diferentes para cada persona. Sin embargo, lo que todos los mandalas tienen en común es que son bellas obras de arte que pueden utilizarse para promover la paz, el equilibrio y la armonía en nuestras vidas.
Significado.
Se utilizan a menudo como forma de meditación, ya que pueden ayudar a concentrar la mente y fomentar una sensación de calma. Los patrones simétricos y las formas que se repiten pueden ser relajantes y terapéuticos, ya que proporcionan una sensación de orden en un mundo que de otro modo sería caótico.
Para muchas personas, también tienen un significado espiritual, ya que sirven como símbolo del universo o del cosmos. En el hinduismo y el budismo, por ejemplo, se utilizan a menudo como herramientas de contemplación y autotransformación. Al estudiar los intrincados patrones que tienen en sus formas variadas, se puede aprender sobre la interconexión de todas las cosas y desarrollar una mayor comprensión de uno mismo y del mundo que nos rodea.
Por esta razón, tanto si las consideras como obras de arte o como símbolos con un significado profundo, pueden ser herramientas poderosas para promover la paz y el equilibrio en la vida de cualquier persona.
¿Cómo crear un mandala?
Pueden ser creados por cualquier persona, independientemente de su habilidad artística, y a menudo se utilizan como forma de meditación. El proceso de creación de un mandala suele considerarse tan importante como el producto final.
No hay reglas establecidas, pero hay algunos pasos básicos que pueden seguirse.
- Elige el tamaño y la forma. Puede ser redondo, cuadrado o cualquier otra forma que te guste.
- Después, decide los colores que quieres utilizar. Suelen tener colores y dibujos brillantes. Una vez elegidos los colores, empieza a dibujar tu diseño en el centro de tu papel o lienzo.
- Repite patrones y formas hasta que esté completa. Cuando hayas terminado, toma un paso atrás y admira tu obra.
Los beneficios de crear mandalas.
El acto de crear una puede ser bastante terapéutico, ya que proporciona una sensación de calma y ayuda a concentrar la mente. La naturaleza repetitiva de dibujar o colorearlas puede ayudar a calmar los pensamientos acelerados que tan a menudo causan estrés y ansiedad. De este modo, pueden utilizarse como herramienta de relajación y atención plena.
En este sentido, su creación puede promover la creatividad, aliviar el estrés y la ansiedad, fomentar la autoconciencia y proporcionar una sensación de logro. Tanto si eres un artista experimentado como alguien que nunca ha usado un color, se trata de una actividad con mucho que ofrecer para todos.
Relajación y el alivio del estrés.
Se ha demostrado que son útiles para reducir la ansiedad y fomentar la sensación de bienestar. Incluso pueden crearse con diversos materiales, como lápices de colores, rotuladores, pintura o incluso arena. En este aspecto, la diversidad de materiales proporciona ayuda a la mente y promueve una sensación de calma.
Lo importante es permitirte relajarte y disfrutar del proceso. Después de todo, en el arte no hay errores y las mandalas entran en esta categoría.
También se utilizan para la curación personal de varias maneras. Dibujar o colorearlas es una forma de meditación activa que puede ayudar a concentrar la mente y promover la relajación. Si estás trabajando con un tema concreto, puedes crearla a modo que represente tu intención de curación.
Por ejemplo, si estás luchando contra la ansiedad, podrías crear una de color azul para representar la calma y la serenidad. Por otra parte, si buscas la curación física de una enfermedad o una lesión, podrías optar por utilizar colores asociados a la vitalidad y la energía, como los rojos y los naranjas.
En este sentido, son medios flexibles en los que se pueden manipular las formas y los colores para un propósito especifico. Por esta razón son muy populares, ya que no están definidas por un tema en particular y pueden adaptarse a cualquier situación o persona.
Hay muchos diseños hermosos disponibles en Internet y en libros; sólo tienes que encontrar uno que resuene contigo y dedicar algún tiempo a concentrarte en él.
Terapia artística.
Como son creados por cualquier persona, independientemente de su habilidad artística, a menudo se utilizan como forma de arteterapia. Se dice que el acto de crearlas es terapéutico y puede ayudar a fomentar la creatividad y la autoconciencia.
En el caso de los artistas que tienen un bloqueo mental, puede ser una herramienta muy útil para encontrar inspiración o simplemente tomarse un descanso para reflexionar mientras siguen poniendo en practica sus habilidades.

Debido a esto, las mandalas son un medio flexible que se puede utilizar para un sin fin de cosas. Todo depende de la persona y de lo que esté dispuesto a construir. Incluso si utilizamos algo prefabricado, podremos ver en el diseño una parte de la esencia de su creador.