En el español e incluso en cualquier otro idioma siempre se tendrán elementos fundamentales de los que nunca se podrá prescindir, ya sea porque son una base para todo el lenguaje o porque de estas partes depende el sentido de las palabras, y sin duda los verbos están entre los más importantes.
Cuando platicamos o al redactar un texto siempre los utilizamos, porque de hecho es más difícil tratar de decir o escribir algo sin usarlos. Esto está relacionado con el uso que le damos y nos muestra que simplemente no tienen reemplazo. Por esta razón hay que conocerlos bien y entender su propósito en la gramática.
Verbos.
Son las palabras o la parte de la oración que se encarga de expresar las acciones que realiza alguien más, desde el sujeto hasta elementos que se encuentren en el predicado. Es un concepto muy flexible, porque también hacen referencia a actividades mentales o incluso a estados en los que uno se encuentra.
En este sentido, también cambia de acuerdo a si es la primera, segunda o tercera persona, la actitud que toma la gente, el momento al que se hace alusión o hasta quien hace o recibe las acciones que se indican. Por esta razón se tienen muchos tipos, como una evidencia de lo complejos que llegan a ser.
Función.
Si bien las variaciones que tienen estas palabras se pueden ver como simples conjugaciones, lo que destaca aquí es la finalidad que tienen en la lingüística.
Voz.
Su tarea es mostrar la dirección sobre cómo se hace una acción, ya sea que el sujeto haga o reciba ésta.
Fuimos perseguidos por un perro.
La casa fue derribada por un temblor.
El escritor redacta varios textos.
Mi papa cierra la puerta con llave.
Modo.
Lo que se manifiesta aquí es la intención o la actitud de la gente al hablar, ya sea desde una opinión, una posibilidad, duda, un hecho o hasta una orden.
¡Detente!
Si camináramos por aquí, llegaríamos más rápido.
Espero que no llegues tarde.
Comemos durante el descanso.
Persona.
Aquí lo que se tiene es la perspectiva del hablante o de elementos externos a los que solo se hace referencia en la conversación.
Esperare el tiempo que sea necesario.
¿Recuerdas lo que tenias que hacer?
El jefe dijo que podíamos irnos temprano.
Tiempo.
En este caso toda la oración expresa lo que se realiza en determinado momento, algo que ya se vivió o incluso un hecho incierto que podría suceder.
Ahora estoy ocupado haciendo mi tarea.
Estuvimos jugando hasta cansarnos.
Veremos las luciérnagas en la noche.
Otro modo de verlos es en las formas no personales que toman, las cuales son el infinitivo, participio y gerundio, y que debido a su uso, dichos elementos pueden considerarse equivalentes al sustantivo, adjetivo y adverbio.
Correr le hace bien a tu cuerpo.
La dirección escrita sobre la mesa era clara.
Corriendo fue como nos alcanzó ese niño.
Viéndolo de manera simple, la clave de los verbos está en la acción que indican y la forma en la que integra las oraciones para que éstas se puedan entender adecuadamente. Ya sabemos que incluso por si solas estas palabras dicen mucho, pero cuando no están presentes prácticamente nada tiene sentido, por lo que su estudio es fundamental.