Las personas en cualquier parte del mundo deciden vivir en un pueblo o en una ciudad, ya sea por las oportunidades laborales, los puntos interesantes que hay para visitar o porque en otro lugar se puede estar más relajado, no hay ni ruido ni contaminación, etc. Ambas zonas son únicas, por lo que hay que ver a detalle cada una para entender bien que las distingue.
Las características entre ambos términos varían de país a país y aunque para algunos son lo mismo o simplemente no están bien definidos los puntos que los separan, a simple vista se pueden ver diferencias claras.
Ciudad.
Una de las diferencias principales de una ciudad con un pueblo es que tiene un mayor numero de habitantes y en este sentido hay que entender que la población varia demasiado en ciertos lugares. Países como Japón y los Estados Unidos, que tienen millones de habitantes, consideran un asentamiento como una ciudad cuando ésta alcanza varios miles de residentes pero en el caso de países con menos personas con unos cientos bastaría.
Otro punto a notar es la geografía urbana de lugar, ya que en este caso las ciudades son más grandes y además suelen estar en constante crecimiento hasta el punto de incorporar a las poblaciones cercanas en su propia área.
Los servicios con los que cuentan las ciudades por lo general son mayores y van desde los administrativos o gubernamentales hasta los más simples como los del ocio y el entretenimiento. La planeación es mejor, los caminos conectan con eficiencia los puntos importantes y las construcciones en general suelen ser más modernas.
Grandes empresas establecen sus oficinas centrales en las ciudades por el alcance que pueden tener a una escala nacional, y para ser eficientes requieren de mucho personal. El flujo de capital es mayor ya que se pueden conseguir más cosas y hay muchas opciones de trabajo.
El ritmo de vida que llevan las personas en estos lugares suele ser muy intenso ya que se combinan muchos factores, que van desde la contaminación y como afecta a nuestra salud hasta las largas y agotadoras jornadas laborales.
Pueblo.
Los pueblos por lo general son más pequeños y por ende tienen un menor numero de habitantes y como se mencionó antes, esto depende de la densidad población del país en cuestión, pero aun así, al compararlo con las grandes ciudades simplemente abarcan un área menor.
La geografía del lugar es más rural y normalmente los pueblos no crecen demasiado, ya que al haber menos gente tampoco es necesario. Un detalle importante es que además de no crecer, a veces reducen su tamaño ya que la gente opta por irse a la ciudad por distintas razones.
Los servicios que se pueden encontrar pueden ser los mismos que hay en las ciudades pero con la diferencia de que hay un abastecimiento menor como en los servicios de salud o en algunos casos se tienen que visitar pueblos colindantes para cubrir las necesidades básicas.
La economía local puede ser sostenida por empresas pequeñas o medianas y éstas por lo general no tienen muchos empleados. Por lo mismo la circulación de dinero no es tan grande por estas zonas y se mantiene de fuentes exteriores, además de que las oportunidades laborales pueden ser mínimas.
La vida en estos lugares es más relajada y tranquila, en algunas zonas se está rodeado por la naturaleza y el aire es más limpio ya que las fuentes contaminantes son menores. Aun así el gusto por este estilo de vida depende de cada quien porque para los más jóvenes puede ser aburrido.

La confusión entre estos dos términos se da porque no es claro y a veces ni siquiera son oficiales los detalles que separan a un pueblo de una ciudad. Además, la gran variedad de densidades poblacionales que hay en el mundo nos obligan a ver los significados desde perspectivas diferentes.