Uno de los problemas de salud que ha cobrado más notoriedad en la actualidad es la diabetes, tanto por sus efectos no vistos en otras enfermedades, como por el número de personas que la padecen y cuyas cifras no parecen disminuir a pesar de las constantes advertencias de especialistas.
El hecho de que aun no tenga cura y solo se pueda tratar hace que la gente tome ciertas precauciones, pero lamentablemente lo hacen cuando saben que ya desarrollaron este mal. Aun así, existe mucha gente con altas probabilidades de pasar por la misma experiencia, por lo que es importante conocer el origen de esta enfermedad para crear un estilo de vida que ayude a evitarla y a su vez, ser conscientes de sus secuelas para darle la seriedad adecuada.
Causas de la diabetes tipo 1.
En este caso se tiene la variación de la enfermedad menos común, ya que representa aproximadamente un 10 % de los casos totales. Es una condición para toda la vida donde se tienen que estar revisando constantemente los niveles de glucosa en la sangre y seguir una dieta adecuada.
Reacción autoinmune.
El sistema inmune que se encarga de muchos procesos dentro nuestro cuerpo es un elemento complejo que actúa en nuestro beneficio, pero hay situaciones donde hace lo contrario y en este caso en especial, destruye las células en el páncreas encargadas de la producción de insulina.
Poca o nula producción de insulina.
El cuerpo no es capaz de producir insulina, lo que impide que nuestro organismo funcione correctamente y surja la diabetes. La glucosa que normalmente sería una fuente de energía para el organismo gracias a la acción de la hormona del páncreas, se va acumulando en la sangre generando muchos problemas en el cuerpo.
Causas de la diabetes tipo 2.
Es la forma más común de la enfermedad y la que se puede controlar simplemente con un estilo de vida adecuado, desde hacer suficiente ejercicio, hasta mantener una dieta saludable, pero como es progresiva tarde o temprano se tendrá que recurrir a los medicamentos.
Mala alimentación.
Aquí se presenta uno de los principales elementos que siempre se relaciona con la diabetes: el azúcar. El páncreas puede generar la cantidad de insulina suficiente para procesar la glucosa y dar energía a las personas pero si se le exige demasiado, llegará un momento en que su eficiencia disminuirá. Esto tiene mucho que ver con las cosas que comemos, ya que la gente que consume cosas dulces o refrescos es más propensa, pero también se pueden incluir otro tipo de alimentos como la comida rápida.
Obesidad y falta de ejercicio.
Las personas con problemas de sobrepeso son más propensas a desarrollar esta enfermedad, porque cuando hay demasiada grasa abdominal, se liberan ciertos químicos que desestabilizan el metabolismo, entre otras cosas más. Esto también se debe a la falta de actividad física de la gente, ya sea por la falta de tiempo, de motivación o por llevar un estilo de vida muy sedentario.
Razón hereditaria.
Si se tienen familiares con un historial activo de esta enfermedad, las probabilidades de desarrollarla suelen ser altas. Esto se puede evitar con una dieta balanceada o ejercicio constante, pero tampoco es una garantía, ya que si existen varias generaciones con diabetes, tal vez sea inevitable contraerla.
Edad.
No es un punto que esté comprobado del todo, pero el hecho de realizar menos actividad física y que las funciones esenciales del organismo se hagan con menor eficiencia contribuye a la aparición de la enfermedad.
Consecuencias de la diabetes.
Problemas del corazón.
Este padecimiento está estrechamente relacionado con altos niveles de colesterol y una alta presión en la sangre, cuyos efectos aumentan el riesgo de un paro cardíaco u otros males similares. La glucosa también contribuye a la formación de depósitos de grasa que dificultan la circulación de la sangre y que generarían situaciones más graves si se acumulan con el tiempo.
Visión comprometida.
Los vasos sanguíneos que hay en detrás de la retina se pueden inflamar e incluso hay ocasiones donde éstos se pueden romper. Esto trae complicaciones a vista de las personas, ya que pueden surgir cataratas o glaucomas y hasta casos donde hay una perdida de la visión total.
Daño a los riñones.
La diabetes afecta los pequeños filtros con los que cuentan los riñones para separar lo que el cuerpo necesita de lo que no en forma de desperdicio. A largo plazo esto puede significar un problema irreversible por una falla o incluso algo que requiera un trasplante. Esto se puede notar con niveles altos de proteína en la orina de las personas, siendo además otro síntoma muy común, el querer orinar frecuentemente.
Efecto en los nervios.
Azúcar excesiva en la sangre puede dañar los capilares, que son los vasos sanguíneos que llegan a los nervios y como éstos están en todo el cuerpo, sus efectos se pueden presentar de diferentes formas: desde una sudoración poco común, hasta el entumecimiento de los brazos o los pies.
La percepción que tenemos de las cosas puede cambiar completamente, ya que sería más difícil saber si algo está caliente o frío. Esto también provoca que las lesiones o heridas se desarrollen sin que uno lo note hasta que deriven en problemas más complicados y graves.
Impacto en la piel y los pies.
Los altos niveles de azúcar en la sangre hace que los fluidos naturales del cuerpo se pierdan más rápido, teniendo como resultado una piel más seca. En este caso, una parte muy sensible a esto son los pies, ya que la circulación de las piernas hacia abajo disminuye y además se agrega el efecto a los nervios que se encuentran ahí.
Amputaciones.
Con una piel seca y más propensa a lesiones, callos o ulceras se corre el riesgo de desarrollar infecciones que requieran como ultima medida remover la parte afectada, siendo una situación muy común la de los pies.